“La casa de Dios” en la Tierra es un sitio lleno de misterios. En la actualidad, el Cristianismo sigue siendo la religión más practicada y difundida en al mundo, y el lugar de concentración más importante para sus creyentes, El Vaticano, es por mucho, un sitio bastante peculiar.
Hacer una lista de todas las teorías de conspiración surgidas del Vaticano es una tarea extensa en sí misma; y es que, la mayoría de dichas teorías están justificadas.
Ya es un hecho confirmado que La Iglesia y el Vaticano ayudaron a Nazis a escapar después de la Segunda Guerra y que los pedófilos, abundan entre sus “hombres de fe”.
Tomando en cuenta tantos detalles tan turbios, nos surge la pregunta: “¿Por qué el Vaticano es tan extrañamente sombrío?” En serio, lo es. ¿Aún quieres más pruebas? Da un vistazo a 3 “peculiaridades” del Vaticano que sin duda te dejarán pensando en poco.
El salón de audiencias del vaticano parece una serpiente, literalmente
Todos sabemos que el Vaticano se ubica en Italia y que su arquitectura es una de las más impresionantes y ricas del mundo. Teniendo esto en cuenta, uno esperaría un alto nivel de compleja planificación, en base a su sistema de creencias, para el diseño de muchas estructuras importantes… Pero algunas podrían hacer pensar lo contrario; por ejemplo el extraño diseño arquitectónico de la sala de audiencias papal.
La sala de audiencias del Vaticano fue construida en los setenta por Pier Luigi Nervi, como un santuario en el que el Papa se dirige a los visitantes y peregrinos, pero lo impactante del edificio es su arquitectura serpenteante, tanto por dentro como por fuera. Es que, literalmente, todo el edificio para la cabeza de una serpiente.
Cuando se buscan imágenes sobre la sala de audiencias, las fotos muestran la sala interior del edificio. Estando de frente en la entrada, se puede ver la obvia imagen que se crea la vista.
Las dos ventanas en la parte superior izquierda y derecha parecen ser unos ojos, debajo, la tarima donde el Papa se dirige a las personas parece la boca (con colmillos y todo) de una serpiente… Todo justo en frente de los creyentes.
Pero no nos apresuremos por sacar conclusiones… ¿Quizá sea solo la pareidolia? El fenómeno que “nos hace ver caras” en donde no las hay… ¿Pero podemos estar de acuerdo en que, desde cualquier ángulo parece una serpiente?
Además, por si fuese poco, desde afuera, las vistas aéreas del edificio muestran que el exterior también simboliza la cabeza del rastrero reptil. Las ventanas laterales, que parecen ojos desde adentro, también cumplen la función desde afuera. El extremo más delgado del edificio tiene las características nasales.
Lo que es más espeluznante es que el asiento del Papa desde donde se dirige a la multitud se encuentra justo en la boca, justo entre los colmillos de la serpiente; y aún hay otro detalle que se combina con esta peculiaridad” de diseño. Vamos a verla:
¿La resurreción del “salvador serpiente” ¿o quizá “Baphomet”?
Todo creyente de la iglesia que haya visto o asistido a una de las audiencias matutinas de los miércoles, donde el Papa se dirige a los cristianos en el Salón de Audiencias Pablo VI (el anterior mencionado), ha visto el protagonista de esta “peculiaridad” del vaticano.
Detrás del Pontífice, una gran estatua sombría llama la atención. La Estatua de la Resurrección del Vaticano no es del gusto de todos, pero sin duda vale la pena verla.
Diseñado para representar a Jesús emergiendo del sitio de una bomba nuclear, la pieza es una muestra de que, aunque no se quiera ser conspiranoico, el Vaticano es un sitio extraño… Algunos consideran ver en esta estatua, a un Jesús con cabeza de serpiente desde ciertos ángulos.
Muchos teóricos de la conspiración afirman que el edificio en sí mismo y la estatua son una burla directa a los ciegos creyentes del falso Dios. A través de los representantes de los Reptilianos que dominan el mundo desde las sombras, los cristianos estarían adorando, realmente, a entidades extraterrestres.
¿El significado “oficial” de la Estatua de la Resurrección de la Ciudad del Vaticano? Fazzini lo diseñó para simbolizar a Jesús elevándose por encima del caos producido por la inconsciente sociedad humana, para emerger resucitado a través de seres fantasmales que no lucen muy felices…
Se supone simboliza al Salvador, elevándose por encima de un holocausto nuclear, la desesperación y el pecado. Invitamos al espectador a sacar sus propias conclusiones.
Según algunos de los aficionados a la conspiración, la estatua representa a Baphomet, una deidad que supuestamente adoraban los Caballeros Templarios y se convirtió en el principal símbolo e ídolo en el ocultismo, el arte de las estrellas del pop y el simbolismo de los Illuminati.
Estas teorías de conspiración afirman que si miras la estatua de la Resurrección en su lado derecho como en un espejo, puedes ver claramente la cabeza de Baphomet que tiene la forma de una cabra, devolviéndote la mirada. Esta es solo una de las muchas teorías de conspiración que rodean a la escultura.
Un nombre de origen no muy cristiano
Estamos tan acostumbrados al nombre “Vaticano” que apenas pensamos en cómo obtuvo ese nombre. La verdad es que el nombre Vaticano no es ni latino ni griego y no se puede rastrear hasta la Biblia, y sin embargo, el Vaticano es un símbolo del cristianismo.
La palabra que asociamos con la Iglesia está íntimamente ligada a la diosa etrusca Vatika. Como estás a punto de descubrir, el nombre "Vaticano" es anterior al cristianismo y está envuelto en misterio. El nombre que asociamos con la Iglesia tiene un origen pagano.
Hace más de veintiocho siglos, y antes de la legendaria fundación de Roma por Rómulo y Remo, existieron los Etruscos. Hace unos 3000 años, los etruscos se asentaron en una región del centro de Italia conocida como Etruria.
Todavía no se ha descifrado completamente el idioma de los Etruscos, pero a lo largo de los años hemos aprendido mucho sobre sus creencias y su vida cotidiana. Los etruscos no enterraban a sus muertos dentro de los muros de sus ciudades. En cambio, construyeron un gran cementerio en la ladera de una colina fuera de su ciudad, en el área que luego se convirtió en la ciudad de Roma.
Lamentablemente, la mayor parte de la literatura y la mitología etruscas se han perdido, pero sabemos que la guardiana de esta necrópolis era la diosa etrusca Vatika (a veces deletreada Vatica). Ella era la diosa del inframundo, y era su deber vigilar a los que habían fallecido.
Parece que las creencias de los etruscos sobre el más allá eran similares a las de los antiguos egipcios. El tratamiento de los restos del difunto era necesario para la supervivencia y un viaje exitoso a la próxima vida.
¿Interesante, no crees?
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